Nuestros cercos eléctricos de seguridad consisten en un equipo energizador-generador que convierte corriente de la batería en pulsos eléctricos no letales de alto voltaje pero bajo amperaje. Estos pulsos se denominan "golpes" y serán sentidos por una persona al momento de tocar un alambre de una cerca eléctrica.
Dado que nuestros equipos monitorean el estado del cerco constantemente, activará una alarma en caso de detectarse alguna anomalía, tal como cortes de alambre o contactos con el cerco por sobre un tiempo predefinido, esto último para evitar falsas alarmas.
El equipo incluye además un sistema único y exclusivo de control de impedancia que controla el estado del cerco incluso cuando está desconectado, detectando cualquier falla en el cerco, como cortes de alambre, corto circuitos en la línea, etc.